Hoy recordamos 20 años desde los atentados terroristas del 11 de septiembre, 2001, que cobraron la vida de casi 3,000 personas en la Ciudad de Nueva York, Washington DC y en los campos de Pensilvania; con víctimas de más de 90. La oscuridad de ese día nunca podrá borrarse, pero cada año nos brinda la oportunidad de recordar a quienes perdimos y a quienes han aportado – como socorristas, soldados, personal médico y trabajadores para que podamos vivir nuestras vidas con libertad y prosperidad. Honremos todos su memoria y que este día sirva siempre como testimonio de su sacrificio, su valor y su compromiso.
