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Palabras del Embajador William W. Popp, en Acto de Graduación de la UVG Altiplano
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11 marzo 2023

Palabras del Embajador William W. Popp, para la graduación en la UVG Altiplano

UNIVERSIDAD DEL VALLE (UVG) ALTIPLANO
Sábado, 11 de marzo de 2023

 

Estimado Licenciado Roberto Moreno, Rector de la Universidad del Valle de Guatemala;

Estimados Miembros de la Fundación UVG, Fundación de los Estados Unidos de la UVG, Director Ejecutivo, Decanos, Directores y otros miembros de la comunidad UVG;

Estimadas autoridades municipales y de entidades del gobierno;

Estimados graduandos, familiares, señoras y señores:

¡Muy buenas tardes!

Xb’eqij Iwonojel! La utz awach?

Es un verdadero honor estar aquí con ustedes para esta ceremonia de graduación de la Universidad del Valle Altiplano.

Cuando el Dr. Moreno me invitó a la graduación, me sentí muy honrado por varias razones.

Primero, porque es un momento singular en sus vidas como graduandos. Un momento para reconocer lo que han logrado como estudiantes. Y el final de un capítulo de sus vidas y el principio de otro, al mismo tiempo.

Segundo, me siento afortunado por la oportunidad de compartir con esta comunidad y contribuir a ella.

Hoy, ustedes, los graduandos, están a punto de alcanzar algo espectacular: un título universitario. ¡Un título que los va a acompañar el resto de su vida es un logro y esfuerzo compartido!

Vemos a sus padres, abuelos, hermanas y hermanos, a sus colegas, amigos, y profesores, a los dirigentes de esta universidad. También es muy importante mencionar a los miembros guatemaltecos y estadounidenses de la fundación que apoya a la UVG y a su programa de becas.

Vemos a tantas personas que han viajado desde lugares como La Democracia, Huehuetenango, Tacaná, San Marcos y San Miguel Ixhuatán y, claro, Sololá y los alrededores para celebrar este momento.

Por otro lado, contamos con nuestros amigos de la Fundación en los Estado Unidos, viajando desde los estados de Kansas, Nueva York, Carolina del Norte y la capital, Washington, hasta este punto para reconocer este momento. ¡Su momento!

Y finalmente, me honró esta invitación por la tradición y el vínculo entre los Estados Unidos y la Universidad del Valle.

Como ustedes saben, este campus Altiplano tiene su propia historia. No siempre fue un lugar de paz y aprendizaje.

Su conversión a un lugar de educación superior en 1999 fue posible gracias a la visión y el liderazgo de la UVG, de los gobiernos de Estados Unidos y de Guatemala, y de ciudadanos guatemaltecos y estadounidenses que sabían que la mejor manera de construir un futuro mejor en Guatemala era invirtiendo en los profesores y científicos que podrían educar a las nuevas generaciones.

Desde los inicios de la UVG Altiplano, muchos embajadores estadounidenses la han visitado y contribuido a su éxito. Su biblioteca lleva el nombre de uno de ellos: el Embajador John R. Hamilton. Así que, como actual Embajador de Estados Unidos en Guatemala, de verdad es un honor sumarme a esta tradición de los diplomáticos estadounidenses que me precedieron y reconocer, una vez más, nuestro vínculo con la UVG y el campus Altiplano.

Dije al principio que este es un momento de finales y comienzos. Dentro de un momento recibirán su diploma. Es un reconocimiento de que su viaje como estudiantes está terminando. Los finales en la vida por supuesto son muy importantes. Y también son claros. Son concretos.

Sin embargo, en muchas maneras, los comienzos son aún más importantes y muchas veces, más difíciles. Son abiertos e inciertos.

Así que me gustaría pasar el resto de mi tiempo con ustedes hablando de esta parte importante de su graduación: su nuevo comienzo. Su futuro. Y quiero hacerles la sencilla pregunta “¿Qué harán ahora?”

Quizá es un reto, tanto como es una pregunta. Estoy seguro de que muchos de ustedes estarán pensando en esto: Ahora que mis clases terminaron ¿qué me traerá el mañana? ¿La semana entrante? ¿El próximo año?

Los hechos son maravillosos: Ustedes ahora son profesores, ingenieros, científicos, expertos forestales y administradores de empresas. Saben cómo educar a los niños, hablar nuevos idiomas, programar computadoras, construir empresas y salvar el ambiente.

Sin embargo, es importante reflexionar en cómo van a usar su educación. Es una pregunta que se hacen todos los graduados. Recuerdo haberme preguntado lo mismo cuando me gradué de la universidad. Puede ser una pregunta que da miedo, pero también puede ser maravillosa.

Martin Luther King Jr. es uno de mis héroes. Como muchos de ustedes saben, el Dr. King fue el dirigente del movimiento por los derechos civiles en Estados Unidos en los 60s.

Él fue un líder fundamental en sembrar las semillas de una sociedad más igualitaria, y logró nuevos niveles de justicia y de acceso para millones de estadounidenses, sin importar el color de su piel. Su valentía, visión y compromiso con la idea de que todos somos creados iguales, y el movimiento cívico que él inspiró, sigue siendo uno de los mayores legados de mi país.

Pero el Dr. King no empezó su carrera como un ícono nacional, sino como un estudiante y predicador en una pequeña iglesia comunitaria. Su mayor fortaleza fue hacer que quienes lo rodeaban fueran mejores de lo que creían que podían ser. Empezó desde su pequeña comunidad, y esa comunidad creció hasta incluir a una nación.

A pesar de su éxito, el Dr. King comprendía el desafío de los comienzos.

Una vez dijo: “Da el primer paso con fe. No tienes que ver toda la escalinata; sólo da el primer paso”.

Para todos ustedes, quiero decirles que ese primer paso está justo frente a ustedes:

Está sentado al lado tuyo en esta sala.

Vino en el carro contigo a esta graduación.

En otras palabras, ese primer paso es la comunidad de la que vienes, y la comunidad a la que te has unido aquí en la UVG Altiplano.

Hace apenas una hora, antes de esta graduación, tuve la oportunidad de reunirme con un pequeño grupo de ustedes, los graduandos, y escuchar sus historias.

Hablamos de los sacrificios que hicieron ustedes y sus familias para obtener este título. Hablamos de lo que han estudiado, de su experiencia como estudiantes, de sus planes profesionales y de cómo muchos de ustedes equilibraron trabajo y estudios al mismo tiempo.

Pero lo más inspirador de nuestra conversación no fue hacia dónde van, sino de dónde vienen: sus familias, sus comunidades.

Y esa es la intención de esta educación.

La educación es una fuerza poderosa para la transformación, y ustedes, los graduandos, tienen la gran oportunidad y la responsabilidad de transformarse a ustedes mismos y a su país en algo mejor.

Esa es la misión de la UVG. Es la razón por la que la Fundación UVG trabaja tan duro para proporcionar becas y hacer posible la educación: para que sean mejores y brillen donde quiera que estén. Y esa es la misión a la que te uniste cuando te convertiste en un estudiante aquí.

En los próximos días, espero que te preguntes con frecuencia “¿qué voy a hacer ahora?” y espero que la respuesta esté clara en tu cabeza: Voy a devolver algo a mi comunidad.

Voy a mejorarla. Voy a hacerla prosperar. Voy a fomentar oportunidades en mi comunidad.

Pero también espero que recuerden que sus comunidades tampoco han terminado de darles a ustedes.

Recuerden la sabiduría y la experiencia de sus mayores: permitan que les guíen y les muestren el camino.

Manténganse en contacto con sus profesores y compañeros aquí en la UVG, para que su aprendizaje siga toda la vida. Y deja que las necesidades de tu comunidad sigan siendo tu respuesta a “¿Qué voy a hacer ahora?”

Algún día en el futuro otro estudiante se sentará en la silla donde estás ahora, y tú puedes ser la razón por la que lo haga.

Ayuda a la próxima generación a llegar hasta aquí. Está en tu poder hacerlo.

Para terminar, quiero hacer referencia a uno de los conceptos más famosos del Popol Wuj, el “Winaq” que significa crear, construir o reconstruir, pero también significa vida o persona completa.

Ahora, espero que cada uno de ustedes lleve este concepto para contribuir al avance de sus comunidades.

En Estados Unidos solemos decir que nos apoyamos sobre los hombros de quienes nos precedieron.

Hoy, les animo a todos a mantenerse erguidos y chispudos para el beneficio de sus comunidades, su país, y el mundo.

Y, a lo largo de tu vida, espero que sigas preguntándote “¿qué voy a hacer ahora?”

Haz una pausa, mira a tu alrededor y busca la respuesta.

¡Gracias y buena suerte!